dijo la prensa


Natalia Marcet: Una actriz sin caretas...............................

"un pedacito de infierno, robado al recuerdo y trasformarlo en teatro" ........bajo las instrucciones de la directora Ana Woolf, sumado al talento de la actriz, nace "Gordas", que representa no sólo una historia de vida, si no un incentivo para quien lo busque y necesite..........

regalando, envuelto en arte, un pedacito de su pasado, un mensaje positivo.....

Leticia Crossa INFORMADOS (ETER)

...la vimos a ella y a cada una de las mujeres que transitan por ese espacio doliente del cuerpo femenino hecho pedazos en el discurso de los demás. Todos los presentes fuimos ,por un instante ,las gordas

...la escena es descarnada ...un ámbito estetizante y delicado....la perfecta correspondencia para la historia dolorosa de desintegración que se va a narrar desde adentro

Adriana Derosa .NOTICIAS Y PROTAGONISTAS

lunes, 5 de julio de 2010

Los viajes de GORDAS

El 3 seria la función. Había llegado el 31 a Bogotá. Y en cuatro días, solo podía decir que, entre el mítico Barrio La Candelaria, yo, había comenzado uno de esos romances que te acompañan, por el resto de tus días. Y que queres mantener.
El día anterior, el 2, luego de haber ido a recibir a Ana, mi directora al aeropuerto, acompañando a Selene y al dulce Nicolás, (quien por lo bajo me contaba el secreto de las Custodias), había batido el merengue italiano en la cocina de la casa de Patricia Ariza, hablando con Arístides Vargas. Yo había visto uno de sus textos puesto en escena por un director español, y, mientras transcurría la obra, me salía de la silla por saltar al escenario y dejar que esos textos recorriesen mis cuerpos.
Esa noche iríamos a ver “A título personal”, de La Candelaria.
Yo a la mañana siguiente, entraría a sala desde temprano para poder armar tranquila con Jaime Niño. Me tocaba la Seki Sano, sede de la Corporación Colombiana de Teatro.
Antes de entrar en sala ver uno de los espectáculos del Festival, me dice Luis Carlos, uno de los organizadores, si podía hacer dos funciones el mismo día….ya estaba sobrevendidas las entradas ….y la gente la pedía...”
No ¡!!’’, puse el grito en el cielo.”No me da el tiempo de lavar la ropa….no no no no”. Debía ser cauta…Mi calendario lunar me decía que “surgiría un nuevo negocio a partir de una propuesta inesperada y que habría que actuar con cautela para no perder el rumbo.”
Le dije a Ana que no lo haría. Ana asintió. Pegue media vuelta, baje un piso en el hotel. Me metí en la ducha.
Resonaban en mis oídos y en mi cuerpo las palabras de Luis Carlos. Decidí que si conseguían un lugar para lavar y secar la ropa, las telas se sacudirían y podríamos hacer otra función.”Segura? me pregunte? Si, me dije, un nuevo desafío para crecer….queres mas desafío que estrenar vestuario, cambiar sogas por tanzasuyyyyy…demasiado…no?”.
Salí de la ducha.
Me vestí.
Subí un piso y le dije a mi directora:”lo hare”.
Está bien para vos, me pregunto con su amorosidad de siempre? Si, le dije…está bien…
Ay Naty ay Naty ay tu sed de desmesura, tu omnipotencia, me digo hoy .. necesitas siempre aprender a los golpes?.
Entre a la sala a las 9 de la mañana. Jaime había llegado y se puso a colocar las roldanas en el techo .Inauguraríamos tanzas….”te vas a venir abajo” me había dicho la Lucre…
Armamos todo en 5 horas…tardamos…En el medio del armado, Jaime nos miro y dijo…”la verdad, encantadoras…pocas veces se trabaja tan a gusto…”la verdad teníamos miedo…confesaría más tarde Jenny, creíamos que venían las argentinas y llegaba la prepotencia…”…”nada más lejos…diría Jaime Niño, uno de los técnicos mas adorables con los que los Dioses de la escena, han tenido el beneplácito de honrar mi trabajo.
Llegue justita para hacer la función. Ya habíamos arreglado que mi ángel guardián, Julián Valderrama, del Caquetá, esperaría al final de la función y saldría corriendo al lavadero donde limpiarían el bizcochuelo que queda en mi vestido, mientras un ejército de ayudantes contribuiría a quitar todo y dejar listo el escenario para la segunda función.
Esa función de las 5 de la tarde, había sido anunciada una hora antes, y ya las entradas se habían agotado. La Candelaria seguía alimentando el naciente romance entre ese país y yo.
Comenzó el trabajo. En primera fila estaba Arístides, detrás de sus lentes rectangulares.
Antes de salir había invocado a la tigresa Blanca, para que me acompañase en el viaje.
Viajamos…el viaje fue bueno .La función salió muy bien. Una nueva serenidad me invadía en escena .Inusitada. La tigresa hacia buena compañía….
Al terminar la función…me devoro la ansiedad de tener que sacarme el vestido, limpiar...no me pude despedir del publico que había venido a verme…No pude recibir su aplauso ni su abrazo…No les di el pedacito de torta con el que yo los honraba cada vez que se despedían de mi…Julián se llevo el vestido y los demás, comenzamos a limpiar….
Contra reloj, me fui a bañar a la casa de Patricia…Corriendo llegue al Teatro donde estaba ya la cola de gente esperándome, el vestuario limpio y la emoción de saber que Nelsy, Roxana, Luis, Heberto, Ana Cristina, Lavinia Fiori, Juan Monsalve, Jaime, Nora ...y tantos mas, estarían allí…Esa era la función “prime time”.
Salí a escena .Adelante lo veía a Luis, a la gente de España, a Nelsy, a Roxana, a Ebert….todo iba bien hasta que el vestido no subió…
Para quienes no han visto Gordas, tal vez no sea claro...y deba especificar que el vestido ocupa la mitad del espacio escénico, y, que debajo del hay cosas que después uso, y que si no sube me quedo reducida a menos de la mitad del espacio que necesito...
Pues señoras y señores, el vestido no subió. Y fue así como debí decidir seguir adelante. En un espacio escenico reducido donde cada cosa que debía ponerse a funcionar no funcionaba .Al decir futbolero, un gol en contra metido en los primeros cinco minutos, desmoraliza a cualquier equipo...Con la diferencia que aquí yo, como en todo unipersonal, remaba solita...Después me enteraría que Jaime había querido atravesar el techo por la parrilla para poder levantarlo...Que el saber que no podría salir de allí hasta el final de la función, lo había detenido…
Seguí hasta el final. El campo de batalla ya no era territorio conocido sino campo minado por quien sabe que maestros que me estaban poniendo a prueba…
Cuando termino la función, me quería ir.Me daba vergüenza.No podía saludar a la gente.Esa noche había fiesta y yo no pude ir. No podía enfrentar a la gente mirarla y ver en sus ojos el resultado del fracaso.”No estas lista, nena, parecían decirme por todos lados “.Sentía vergüenza por Patricia ,por Eberto, por Ana, por cada una de las personas que me rodeaban y que me habían apuntalado para estar allí .
Me fui sola al hotel.Ana me había preguntado si estaba bien para mi.Yo le había dicho que si, pero en realidad, no estaba nada bien.Me lleve la comida al hotel.Comi dos chocolates y cuando iba a comer el tercero, (ya de ansia no como postre), me dije:”no.esta es mi oportunidad”
Y me acoste a dormir.
A la mañana siguiente sono el teléfono .Yo no quería salir de la habitación .Queria volverme a la Argentina .Era Ana:”Naty, te espero para desayunar..vamos a Casa Saenz a la conferencia?”
En el desayuno le dije a Ana que me quería volver a mi país…A mi pueblo, a la casa de mi mamam y de mi papa.A la falda de mi abuelo Kunkun y a comer queso fundido y alfajor Capitan del Espacio con mi abuela Veja .Que sentía vergüenza por Patricia.Por la gente del Festival.
Ana me dijo que a la gente de Teatro no le había importado .QUE TODOS SABIAN QUE ERA UN PROBELMA TECNICO.Que la tanza se había corrido.Pero que todo el mundo rescataba mi trabajo como actriz.
Esa mañana en casa Saenz, Jckie Vidal, la viuda de Enrique Buenaventura, se me acerco y me felicito .”No importa lo técnico, me dijo ,sos de las actrices que me gustan.,,sutiles presentes llenas de matices y gran energía ,,,bravísima ,que buen trabajo…”
Luego almorcé con Patricia Roxana ,Ana Everto .Everto em abrazo y pregunto “como es que esta esa ninia después de sufrir tanto con esa técnica?”
Me sentí abrazada, Amada .Amparada.
Esa tarde, esperando para entrar en un espectáculo, uan voz me dice felicitaciones.Me sonrojo ..Me excuso pro l otecnico .”Oh ninia, me dice ,eso es técnico ..tu trabajo es muy bueno ..de uan gran presencia…una hermosa energía ..me gusta mucho tu energía ….
Los días pasaron y el dolor y la vergüenza por el fracaso se atenuaron …La tanza no funcinoaba ..Se descarrilaba muy fácil y se estiraba si quedaba mucho tiempo colgando…Cambiaria por cola de raton ..que Jaime me recomendó ..Eso llevaría a Medellin

Medellin, otro capitulo..Capitulo donde la serenidad invadió mi ser y mi cuerpo en el escenario ….Hoy a la luz de los meses, pido perdón a los espectadores que vieron la función “inventada sobre la marcha “, y los invito en cualquier lugar del mundo en que estén, a que presencien una donde “el vestido suba”,me perdono por haber sido descuidada en no revisar la tanza antes de la segunda función…..agradezco que haya sucedido.
Seguía aprendiendo así, yo.
La función me había ensenado varias cosas..pero por sobre todo..Que en el fondo del corazón, el Teatro, sigue siendo el lugar, donde mas allá de todas las coyunturas, de todos los obstáculos, la guerrera que anida en mi, saca sus armas para, a pesar de perder muchas batallas, seguir defendiendo sus ideales hasta el final.

Natalia Marcet.4 de julio de 2010

domingo, 4 de julio de 2010

Los siguientes, son comentarios de adolescentes de 15 anos que presenciaron el espectáculo en el año 2009, en Navarro, Pcia. De Buenos Aires, en la Sala Candilejas. La presentación fue organizada por Zunilda Roldan.

· Siento tristeza, un poco rara, no porque me pase a mí, sino que conocí a una chica. Creo que esto se debería terminar, y brindarles ayuda a estas personas que le sucede….
· Me pareció un espectáculo interesante. Estuvo bueno porque ensena en forma divertida. Me gusto. Esta muy buena la obra porque transmite lo que es esa enfermedad. Me gusto mucho, pero me causo tristeza. Me causo tristeza
· Me pareció muy buena la obra. Me divertí mucho y tiene mucha razón, esta bueno que traten el tema.
· Me gusto porque además de mostrar lo que pasa con muchas personas, en general chicas, fue divertido. Y atrapante. Espero que sigan comprendiendo las personas gracias a esta obra y puedan ver la realidad.
· Tristeza porque pasa
· Es una muy buena forma de ver la realidad y aprender.
· Es una obra muy buena porque te ayuda a reflexionar y aparte muestra la realidad.
· La obra está muy buena porque te ayuda a reflexionar sobre este tema. Aparte está muy bien hecha. Me gusto de verdad.
· Estuvo bueno porque deja una enseñanza y me reí mucho.
· Me encanta la forma en que la interpreta. Una cosa que hizo y que me gusto porque yo había hecho intente hacerlo. Porque estaba mal, triste, pero igual no lo hice .Suerte y no lo voy a hacer.
· Esta bueno que esto no suceda con la gente porque es malo para la salud……
· Me gusto, y en algunas cosas, me sentí identificada…
· La obra me pareció dramática, me dio miedo y me puso triste…
· Me pareció medio agotadora…
· Me pareció medio infantil, pero estuvo buena, me conmovió…
· Me pareció una obra dramática y fuerte...Igual me conmovió…
· La obra tubo RE PIOLA. Demasiado eh?
· Me pareció realista…pero poco lograda...
· Me pareció que estuvo buena, fuerte y realista.
· Me pareció una obra dramática y fuerte .Que demuestra y expresa muy bien las enfermedades que se dan en adolescentes como nosotros.
· Me gusto porque es una forma divertida de darse cuenta sobre lo que puede generar el problema y también lo grave que puede llegar a ser en la persona. Como se ve ella reflejada en el espejo .Estuvo bueno.
· Muy buena obra .Pero mi sensación fue que me daría miedo entrar en esa enfermedad y no poder superarla Gracias Felicitaciones ¡!!
· La obra está muy linda, es muy expresiva y demuestra como es la enfermedad.
· Fue una obra entretenida, muy entretenida y hace que las personas entren en el personaje y puedan sentir lo complicado que es el problema. Deja mucho para pensar.
· Esta muy buena la obra .Me gusto muchísimo y me genero mucho miedo.
· A mí me pareció muy buena la obra, también un poco triste si estoy en ese lugar. Me gustaría que se sigan haciendo estas cosas, así las familias y personas que tienen esa enfermedad cerca, pueden salir adelante.
· Soledad
· Realista.
· Me gusta el tema de la obra pero me aburrió un poco.
· Me gusto porque te hace entender lo de la Bulimia.
· No me gusto pero algunas partes si me gustaron que estuvieron re buenas.
· Me gusto porque la bulimia es un tema importante.
· A mí me gusto y es divertida. Además, es bueno saber sobre el tema. Ya que a jóvenes le pasa.
· Me gusto porque nos deja una enseñanza que afecta a muchas personas.
· Me di cuenta de los riesgos que tiene esta enfermedad y de los problemas que trae…además es difícil salir de esto.
· A mí la obra me gusto. Fue muy fuerte y el hecho de que nos hayan contado esa historia me hace pensar más a la hora de hacer algo.
· La obra me gusto mucho, en algunos aspectos me sentí identificada, y confirme opinión de que las personas son muy crueles y no terminan de aprender que nadie es perfecto, y que primero hay que mirarse uno por dentro y luego decir lo que se piensa de los demás. y nadie entiende que lo que importa es lo que uno es, lo que uno vale ¡!!Tengo 18 años .Felicitaciones, Naty!!
· Estaba drogada y ahora quiero vomitar. Esto es Apología a la Bulimia y a la Anorexia .Viva petardas.com!
· Con la obra me di cuenta lo cruel que es la Sociedad, porque en vez de ayudar a las personas, las daña más psicológicamente. La causa de estas enfermedades alimenticias, mayormente, son por culpa de la Sociedad que tiene un prototipo de figura estética.
· Lo que me di cuenta es que a veces, hay que ver la realidad, hablar más con la gente. Contar lo que nos está pasando y no dejarnos vencer por esta terrible enfermedad que está matando un montón de chicas de corta edad. Muy buena su obra. Me encanto. Sigan así.
· Me dio mucha tristeza y sentí que fue muy discriminada en su vida. La enfermedad le toco a ella, pero creo que estamos en una Sociedad enferma.

· Creo que lo físico no es lo que importa, sino lo que es uno como persona. Yo personalmente, por ahí tuve muchas veces, ganas de ser un poco mas flaca, pero nunca se me cruzo llegar a ser bulímica o anoréxica. Se me da más por hacer actividad física.
· Que la chabona ta re pirada. Name My fucking chota.
· La obra me enseño o mejor dicho me demostró, que siempre se puede salir de los problemas, que todo tiene solución. Que es una enfermedad común hoy en día, y no hay que avergonzarse de haberla padecido en su cuerpo.
· Es impresionante la puesta en escena .Te re conmueve la historia…Te muestra lo que es la realidad. ..Que valentía la chabona para contar su historia de esta manera …es algo conmovedor lo que me paso…
· Estuve cerca de una amiga que lo padeció y me hizo sentir un escalofrío, y me hizo razonar de lo feo que debe ser pasar por eso…que se sale pero que se sufre muchísimo…Me hizo sentir mal por saber que hay gente sobre todo chicas que lo padecen y me hizo sentir el dolor de una misma. Me hizo poner en el lugar de cada una y me dolió muchísimo.
· Senti miedo de llegar a padecer la enfermedad, porque hay personas que te lastiman por las cosas que te dicen.( gorda,etc)Hay veces que ni te dan ganas de mirarte al espejo, porque no me gusta mi imagen, mi cuerpo.
· Me sentí rara porque mi abuela es obesa, y ahora me doy cuenta de lo que ella esta viviendo, o sea como ve ella las cosas y ahora quiero ayudarla. y come un montón, y aunque con mi familia tratamos que no coma tanto es imposible.
· Yo me di cuenta me sorprendí al observar y entender lo que cuesta, los traumas que trae y lo que tiene que pelear alguien que sufre esto, mas allá de que la sociedad lo vea como algo normal. DECIME QUI QUE GA ¡!!!
· Muy buena función .Yo estuve obeso. Ahora peso 80 kilos y juego al Rugby.
· Me di cuenta de lo que sufre tanta gente y le cuesta salir de esta enfermedad que no es nada común en la vida cotidiana, y que es muy feo y se necesita mucha ayuda de la familia y de toda la gente de alrededor .
· Con la obra me di cuenta de que la culpa la tiene la Sociedad, a causa de las cagadas. Hay que aflojarle con eso.
· Yo soy feliz como soy ¡!!!!!
· Vi que cuesta mucho salir de esta enfermedad que no es nada lindo. Para salir se necesita de la ayuda de las personas de su alrededor.
· Me di cuenta hasta que punto llega la enfermedad y que aunque se le ponga voluntad, no es fácil salir sin ayuda.
· Senti que es una situación complicada en la cual debe ser muy difícil estar en ella. Con un poco de fe yo creo que se puede salir de eso. Solo tenes que confiar en vos misma.
· Me di cuenta que es muy feo discriminar a una persona por su apariencia física.
· Me di cuenta de los rasgos problemas que trae. y es muy difícil salir.
· Con la obra me di cuenta que la culpa la tiene la Sociedad a causa de las cargadas.


Escribo todo esto y me doy cuenta de lo importante que es leer inmediatamente lo que los que ven escriben sobre lo que haces .Una mirada de alguien que no conoce pero se identifica se compromete .
Pienso en las palabras que una y otra vez se vuelven a repetir.”Tengo una amiga “….
Miles de veces se repiten las mismas palabras…Preguntar a través de un tercero…SI pregunto por mi…estoy viéndome en espejo…y ya no hay vuelta atrás…
Pienso en esto y me identifico…Con Esos momentos de mi vida en que buscando mis propias palabras hablaba con palabras de otros…Podía repetir textos literarios…parlamentos de personajes…pero en ningún momento decir la palabra propia…la de mi propio corazón.

jueves, 10 de junio de 2010

comentarios de espectadores de Navarro
Esta bueno esto de hacer un comentario, criticas o alagar la obra “gordas”, ya que las actrices o actores se llenan de eso.
Mi caso es alagar, ya que me pareció una obra jugada, por el tema que se trato, y más aun cuando la protagonista de la historia fue la propia actriz. No debe ser fácil representar el papel de uno mismo. Como tampoco debió ser fácil vivir lo que vivió Natalia.
Me pareció una obra donde con poco se muestra mucho. Es muy muy bueno hacer tomar conciencia de tal enfermedad mediante una obra de teatro.
En cuanto a la actriz impecable, desde la voz, movimientos, respiración.¿Cómo hace para cantar, bailar, saltar y no agitarse? Yo tendría que andar con el oxigeno al lado...
Igual todo esto tuve la suerte de comentárselo a Natalia, la verdad…. no al pedo te trajo Zuni!!
Y creo que el broche de oro fueron las últimas palabras que dijiste, donde coincido totalmente que al teatro de Navarro hay que apoyarlo y que es un grupo de fierro, donde yo, por razones laborales, no lo puedo formar pero pongo todas las fichas y apoyo siempre que puedo.
AsÍ q muchísimas gracias!!! Saludos
Aguante el teatro, aguante candilejas!!!!

EZEQUIEL LAMBERT

La obra " GORDAS", significó para mí, la llave que me permitio abrir la puerta de un mundo del que había oído hablar mucho, pero al que jamás había tenido un acceso tan directo. Me encontré sumergida en un conflicto angustiante llevada de la mano por esta excelente actriz, Natalia Marce,t que nos mostró perfectamente los avatares de la bulimia y la anorexia.. Me impactaron escenas, que aun visualizo, por lo impecable de su realización, tales como las toma de las anfetaminas, los temblores posteriores, el simple gesto de introducirse los dedos, el pedido de ayuda…. por enumerar algunas. El uso de los silencios, lo sentíamos en la piel. Y ahora que más?... Todo esto se logró porque confluyeron la actuación de una ACTRIZ con mayúsculas, que narró su experiencia de vida, con técnica, con profesionalismo, pero por sobre todas las cosas, con el corazón, un argumento fuerte, de actualidad, del que aún no se muestra demasiado, quizás por temor, ( todo lo contrario ), una puesta en escena, vestuario, luces, musicalización... ajustada y cuidada en todos sus detalles. Quedé conmovida…. lo que implica que esa noche la magia del teatro, se hizo presente.

NOEMÍ DEL CARMEN BUGIOLACHI de TORRES(Momito)


Lo primero que pensé fue: pucha! Por qué todo lo tenemos que expresar con palabras, ¿nunca te pasó que para algunos sentimientos extremos no existen adjetivos? cómo explicar un dolor mas grande que el mismo universo, o la alegría que sólo se compara con el nacimiento de un hijo, de verdad…. no existen palabras.
Esta obra no sé si tiene muchas palabras para describirla, sí se puede decir... intensa, fuerte, por momentos sobrecogedora, real... es real.
Pero después de responder muchas preguntas de mis hijas, puedo afirmar que, ante todo, es una obra para dialogar, para crear vínculos con los afectos, para estar atentos como papás.
Tiene luz ( y no proviene de la iluminación) sale de adentro de la protagonista, una luz intensa pero que no daña, acompaña en la reflexión y conmueve en cada palabra que pronuncia.Gracias por regalarnos tanta emoción. Hasta cuando te volvamos a ver.
LILIANA SANTIDRIÁN

lunes, 7 de junio de 2010

2010/6/7 pablo lozano
GORDAS(Carta abierta de un espectador agradecido )Ante todo ,además de ser una bella obra ,es un acto de coraje .Porque Naty, nos abre su historia y su corazón para sanar y sanarse .Como todos aquellos que ven atravesada su historia por algún conflicto y deciden compartirlo desde donde mas duele ,desde lo vulnerable ,desde la mismísima carne viva .Por supuesto ,sin dejar de lado las risas ,que por momentos nos ayudan a descomprimir y por momentos nos generan culpa .Como cuando vemos a un gordo , a un flaco ,a un rengo ,o a cualquier otra persona diferente ,que desde la época de los circos ambulantes ,con sus señoras barbudas ,enanos y payasos nos vienen disimulando nuestras diferencias y deformidades ,dejándonos compasivamente del lado de los" normales ". Así también ,por suerte ,nos permite hacernos cargo y nos da vuelta el espejo para que nos miremos ,a nosotros y a los otros .Nos hace tomar nuestros propios conflictos y diferencias y amarlos ,porque en ellos anida nuestro ser y son generadores de nuevas miradas y nuevos caminos.Gracias Naty.Pablo.

comentario de un espectador de honor

lunes, 21 de diciembre de 2009

GORDAS EN TRANSIT

GORDAS en TRANSIT.

Por Natalia Marcet

Lo bueno de los recuerdos es que nos pertenecen. Y nadie te los puede robar, dicen por ahí.
Tardaba en ponerme a escribir para la edición del blog de Magda de este mes.
Escribir significa, para mí, entre otras cosas, dar testimonio de algo que ya sucedió. Documentarlo. Dejarlo asentado para la historia. Y a un mes de haber regresado a la Argentina, no me resigno a que la pura experiencia de la concreción de un sueño se transforme, solamente, en letra escrita. Mi alma aun deambula por cada uno de los seminarios, cada una de las performances, cada rostro, sonrisa o mirada que viví en la sala roja, la sala blanca y la sala negra del Odin, por los pasillos del CTLS, por la suite Royal, la cocina, el Valhalla...por cada uno de los centímetros que significo Transit.
Pero, si no te vaciás no te podés volver a llenar, resuena estos últimos días de septiembre en mis oídos.
Entonces, decido sentarme a contarlo, como se cuenta el secreto más preciado a las personas más queridas: mi mamá y mi papá.
Salí de la Argentina, feliz, decidida a vivir, sin ataduras, dentro de lo posible, esta hermosa oportunidad que me deparaba la vida. Había pedido protección y ayuda. Un día antes había ensayado bajo los ojos de Susana Freire, para que me diera "otra mirada". En Ezeiza, había dejado los extra kilos: ropa, dulce de leche, yerba, programas de mano de Blanca es la noche, que mis papás colocaron en bolsas de supermercado prometiendo guardarlo para la vuelta.
Al poner la pata en el avión me dije: "En 1999, recién recuperada de 14 interminables años de bulimia, fui a Nueva Zelanda, a mi primer Festival Magdalena como participante. Mi miedo, el miedo de mi entorno era: ¿Qué hará esta chica sola y tan lejos con la plata y con la comida? Diez años después Gordas, el solo que cuenta mi "temporada en el infierno", viaja invitado a participar en Transit. Diez años. Una historia. Salir para contar la historia.
No había dormido en todo el viaje. Escuchaba música: "Riders on the store", de The Doors; "Break on through to the other side". Alguna música ambiental.
Al llegar al Odin, veo a Ana salir sonriente y con su rostro coloreado. Salté. Nos abrazamos.
Al entrar encuentro a Julia, a Yamile, a Gabriela, a Luciana.
Ana había preparado sushi para recibirme. "¿Vienes para trabajar en cualquier cosa?", me dijo Julia. ¡Sííí! Aún no podían creer que después del viaje kilométrico, yo estuviera "espléndida". La felicidad.
Allí comenzó la aventura.
Ensayos nuevos con Ana para ajustar "últimas cosas". Ana me pregunta, "¿ensayo previo con Julia, para ayudar a seguir creciendo en el trabajo"? Me asusté. Y le pedí a Ana que la devolución la dejáramos para después. Me equivoqué. Aún creía que yo podía menos de lo que puedo. Aún me veía más frágil de lo que soy, más susceptible. Otra distorsión a limpiar.
Me sumé al trabajo. Días que comenzaban a las 6 de la mañana. Que encontraban huecos donde poder ensayar con Ana en la sala Roja. Y reparar la escenografía que se había roto durante el viaje. Con la ayuda de Fausto, Phillip, Angelo.
Ya había comenzado "En la periferia de Transit" y yo era la encargada de preparar el desayuno junto a Maria, Jess y Meg. Mientras seguíamos con los últimos ajustes para Gordas, y participaba de los seminarios de Julia, Else Marie, Roberta.
Estaba feliz, pero asustada. En el medio, Ana me había propuesto hacer tortas para vender en el bar de Transit. Que contradicción, ¿no?, o qué integración.
El último ensayo antes de la función fue a las cinco de la tarde del 7 de agosto. En la carpa de circo que estaba afuera del edificio. Deborah me había ayudado a ver algunas cosas de manipulación. Francesca me había sugerido alguna que otra cosa.
Caí de rodillas para explicar a los técnicos que debía agujerear la pared para colocar tres pitones: la negociación fue tres pitones, tres tortas.
La noche anterior, entré a armar en sala, la sala Blanca, la misma que en dos oportunidades anteriores había recogido mi sudor de entrenar. Yo soñaba con volver a ella y hacer un espectáculo. Entré luego de ver "The Songs of the Silent", la historia de una sueca que había pasado años en un neuropsiquiátrico. Había llorado mucho al verla, había viajado con ella. Ella era mi compañera de habitación en la suite Royal.
Esa noche, Ana y Francesca me ayudaron a colgar la escenografía. Ahora quedo yo, les dije, y me quedé sola en sala. Comenzaba a habitarla.
Debía cocinar las tortas de Gordas. Debía arreglar dispositivos técnicos.
Terminé de trabajar a las 3 de la mañana. El vestido debería guardarse en el camarín, porque por la mañana estaba el seminario.
A las 11 me levanté. Yamile me había reemplazado en la preparación del desayuno, me dolía todo el cuerpo. Comencé lentamente a hacer las cosas necesarias. Francesca me había regalado un delantal dado por su mamá.
Al llegar Ana, me dijo: "Hoy es fiesta". Claro que sí, pensé.
Una traducción, hecha contra reloj por Zunilda Roldán desde la Argentina y corregida por Ana, aguardaba impresa en una mesa presidida por un cartel impreso por Anne Savage, que en inglés lo ofrecía a quienes no hablasen el castellano para que lo leyesen antes de la función. Yo había ensayado en la Argentina el monólogo del principio en inglés, pero habíamos desistido por esta vez de hacerlo.
Antes de la función, le dejo una invitación con un alfajor a Julia para que viniera. Ella me pregunta si quería que entrase a sala para ver si estaba todo en orden. Le dije que sí. La imaginé en un punto del público, así como a Ana, a Francesca y a Deborah, también a Luciana, a Fausto, a Else Marie, a Roberta, a Donald, quienes me habían acompañado, a Jill, con quien estaba trabajando para The acts.
Entonces llegó el momento. Allí estaba yo, detrás de la mesa con la crema, las bases de las tortas. La gente circulaba a mi alrededor. Luciana se acercó y me sonrió, yo batía la crema. Algunas, Patricia Ariza por ejemplo, me preguntaba: ¿la comeremos? Jill sonreía desde lejos, Geddy me miraba con sus ojos picarones y cómplices, mientras Ana, mi directora, mi hermana del alma, me cuidaba con sus ojos brillantes como un amanecer. Por allí deambulaban Madeline y Helen Varley de Nueva Zelanda, Deborah, me faltaba Sally, no podía dejar de pensar, mientras batía la crema, que Nueva Zelanda había sido la primera salida fuera del agua.
Salir para contar la historia.
Dediqué la función a Ana, a Julia, a Sally, a mi mamá, a mi hermana Virginia (muerta) y a mi abuela Kungatá (artista frustrada).
La noche anterior, por teléfono, mi mamá me había dicho que yo era una heroína. Una sucesión de imágenes caen sobre mi memoria y quisiera ser una cámara fiel para construir el story board de mis recuerdos en cada una en cada una/o de las/os que lean este escrito. Pero pareciera que a veces sesgamos.
Comencé a temblar. Entregué una torta a Phillip (a sus ojos celestes como el mar) y otra a Angelo, para que las guardasen en la heladera y entré a sala.
Ana me abrazó, Julia (con su hermoso saco turquesa y dorado de reina hindú) me abrazó. Abracé a Francesca (que estaba muy emocionada) y entré al vestido que forma parte de la escenografía.
"Naty, tenés que salir para contar la historia" dijo Ana. Otra vez, como cada vez que viajamos juntas con Gordas. Me temblaba la voz. "Mi voz tiembla y voy con ella", dice Julia... Fui con ella.
Una soga se trabó, pero eso no importaba. Diez años después estaba en el lugar deseado, haciendo lo deseado: contar la historia. Mi historia. La historia de una mujer, todas las mujeres que deambulan perdidas por la frontera mental, la periferia de la normalidad, el precipicio.
El teatro me daba nuevamente esa posibilidad de transformar, de convertir: lo que había sido mi veneno es mi alimento.
Posibilidad de adueñarme de mi vulnerabilidad. El centro era ése, no más espejismos de fortalezas mentirosas. Adueñada de mi vulnerabilidad, cuento. Cabalgo una y otra vez mi historia porque el teatro me da las herramientas para hacerlo, para entrar y no desbocarme en ella.
Allí estaba yo, en ese lugar, en ese momento para el cual había trabajado tanto, para transformar.
Escribo esto y una lágrima me recuerda que todo ya es recuerdo, tal vez uno de los más bellos.
Final de la función. El aplauso estalla, me llena el corazón. Veo lo ojos de Ana, los de Julia, los de Francesca, los de Madeline. Me invade una timidez suprema y no puedo quedarme para decir nada ni para agradecer nada. Ya todo había sucedido durante la performance. Me siento desnuda. Me siento adulta. (El rostro de niña no pierde su frescura y se hace mujer).
Salgo a esperar a quienes me habían honrado con su presencia con un pedazo de torta, como siempre luego de cada función. Julia se acerca. "Ahora si podemos hablar ¿no?" Sí quiero. Quiero tu devolución. "Luego te doy el regalo que tengo para ti", dice y se aleja con su saco de reina. Ana me abraza. Yo lloro y ella me dice: "convidá a tus invitados que hacen fila para saludarte".
Los ojos de Luciana, la cara de Geddy y sus palabras, el abrazo de Madeline, el cuidado de Francesca, los ojos de Torgeir, la sonrisa de Anne, los ojos de Donald, los gritos de Fausto, Sabrina, repitiendo una frase del espectáculo, alguien que me dice "es universal". Las palabras "fantástico", "brillante", el amor y el abrazo de Else Marie, de Mónica, de Adriana, Sandra, Hisako, todas y todos, cada una de las personas a quienes todos estos años había encontrado en algún lugar aprendiendo, mientras Gordas se maceraba para poder salir al mundo. Patricia Ariza diciéndome "tienes que venir a Colombia", y Mónica, "tienes que venir a Brasil". María Porter abrazándome, charla posterior con Hill: "Well done". "¿Y cómo es ahora?", me pregunta. "Con líos en los vínculos", le respondo. Entonces ella dice: "Bienvenida a la normalidad".
La normalidad. La deliciosa normalidad.
Luego de todo esto vendí tortas en el bar de Transit.
¿Me miraban distinto después? ¿Me miran distinto, ahora? No. Soy yo la que se mira diferente. Pienso: cada vez que hago Gordas hago centro. Mi limpian. Me limpio. Ritualizo eso que en un momento de pérdida de sentido de la vida me dio aire para continuar: "aún no hice en teatro todo lo que tengo por hacer."
Transformar el veneno en alimento, menuda tarea. El teatro lo hace posible. Transit.
Salir para contar la historia. Hacer el trabajo. Cruzarse. Intercambiar.
Al volver a la Argentina tomo decisiones que cambian radicalmente mi vida. Queda mucho por decir. Seguramente la parte de mi alma que aún deambula por allí se las guarda, retacea su vuelta. Aún no quiere llegar.
Gracias Julia, gracias Ana. Por muchos Transit más.